REALIDADES CONTENIDAS
En su obra, Pedro de Miguel, insinúa desde una aparente fragmentación del espacio las líneas de acción que definen las estructuras de ese plano contenido que son los esquemas, para hacer evolucionar todo un discurso en el que las cosas quedan descritas en masas cromáticas y contornos de transgresión formal configurando un perfil de composiciones definitivamente hermosas.
Su pintura nos seduce por esa capacidad que atesora de no caer en vehemencia colorista. Sus tratamientos son del todo calmos, apaciguadas sugerencias, que más parecen formar parte de un palno velado que de la propia arquitectura de los componetes de la obra. De ahí que adquiera importancia de primer orden ese vértice que establece entre dibujo y pintura.